Aquellos que en la tardecita de ayer, se acercaron al auditorio del Museo Nacional de Artes Visuales, fueron cómplices de una noche mágica, que guardaré por siempre en mi corazón. Era un día especial, porque presentábamos la reedición de la Colección de Pintores Uruguayos para Niños, con nuevas tapas y nuevo diseño interior, a 21 años de la edición del primer volumen y a 10 años de la publicación del último dedicado a Torres García.
Llovía, arreciaba el viento y las alertas meteorológicas auguraban una noche inhóspita. No obstante, la sala se fue llenando hasta quedar totalmente colmada a la hora del comienzo y por si fuera poco tuve el honor de que muchas figuras del mundo del arte estuvieran allí. Referentes culturales como Enrique Aguerre y Adela Dubra, artistas como Ignacio Iturria, Diego Lev y Santiago Tavella, grandes fotógrafos como Diego Velasco y Julio Testoni.
Las palabras de Claudia Amengual, bordadas con su sensibilidad habitual y con esa extraña capacidad para ir más allá de lo obvio, contribuyeron a que desde el inicio tuviéramos la oportunidad de entrar en otra dimensión. Pero luego de mi intervención, llegaba la esperada sorpresa que habíamos anunciado en la invitación y que ahora sí, les puedo contar.
Mi intención era que esta presentación fuera una celebración del arte y de los artistas y por ello imaginé que la mejor forma de honrarlos era haciendo que ellos fueron los protagonistas. De esta forma hice una selección de la correspondencia que entre 1918 y 1928 mantuvieron Barradas y Torres García y que es un testimonio único del respeto y afecto mutuo que se tuvieron.
Fue así, que Kario Herrera con su poderosa voz dio vida a nuestros dos artistas, leyendo en vivo las palabras de Barradas y las de Torres grabado en estudio, con el fin de generar esa sensación de diálogo íntimo y personal que desprenden las cartas. No les voy a negar que estaba nerviosa; para que el efecto se produjera era necesaria una perfecta sincronización entre ambas voces. Pero el hechizo se produjo y gracias al talento de Kairo, todos los presentes nos vimos transportados ….
No tengo dudas, llevaré por siempre esta noche prendida en el mejor ojal de mis recuerdos. Gracias a todos, a los que estuvieron y a los que no pudieron pero sé que quisieron. Todos contribuyeron a la magia de una noche inolvidable.
Gracias!! Gracias!! Gracias!!!
Felicitaciones por el evento!!!! lamenté no poder ir pero me alegro del éxito obtenido y la posibilidad de mostrar tanta belleza. Salú!
Hola Emma, realmente fue una noche muy magica. Se aprende el arte desde la sensibilidad y el afecto. Muchas gracias por compartir tu riqueza. Abrazo